Javier Oran (Diplomatura 15-16), no ha parado de trabajar y, por lo que se vislumbra, se avecina un 2020 prometedor. En #LaCentralitaBlog le seguimos la pista.
Desde que se graduó en Central de cine, Javier ha tenido experiencia en cine, televisión y teatro. Su primer trabajo fue una pequeña parte en una tv movie llamada ‘Asesinato en la universidad’: “Un dato curioso sobre esta escena es que en el pase de texto el día de rodaje nos hicieron cambiar el guion porque no tenía congruencia con la historia y, a partir de ahí, fue todo un poco improvisado”.
Después de realizar en Central de cine con Antonio Raposo el LAB de creación del que salió la obra ‘Tearapia 3.0′, Javier consiguió su primer papel en una serie de televisión, ‘Hospital Valle Norte’: “Carmen Utrilla me llamó directamente sin casting para dar vida a un chico el cual era “poseido”. Soy una persona que se motiva con el trabajo, pero he de reconocer que me dio un poco de miedo que me diesen un papel así directamente porque podía quedar muy bien o muy mal. Me lo preparé a tope y al final todo fue muy bien. Las secuencias de “posesion” las luché un poquito con el director para llevarlas más a algo real que a algo falso y me lo compró”.
A continuación, grabó cuatro capítulos de la serie diaria ‘Servir y proteger’: “todo el mundo fue increíblemente amable y quedé muy contento con el resultado, excepto con mi último capítulo, el cual no me gusta nada mi interpretación, pero son cosas con las que tenemos que lidiar como actores. De hecho, cuando la rodé, salí súper contento pensando que había sido mi mejor escena y luego, todo lo contrario. Esto me lo enseñaron en Central y ahí lo viví: muchas veces cómo vivimos las secuencias no se corresponde con cómo las está viviendo el resto. Y no se trata de sentir nosotros si no de que el público lo sienta”.
Y después de eso llegó su primera oportunidad en cine con ‘Legado en los huesos’, la segunda parte de la Trilogía del Baztán, dirigida por Fernando González Molina y protagonizada por Marta Etura. Javier admite haber aprendido mucho de este rodaje: “Como anécdota, tengo que decir lo importante que es prepararse todo, ya sean ensayos o rodajes. Tuve ensayo en agosto con Marta Etura y con el señor que hacía de mi padre en la película. El señor no se había preparado prácticamente el ensayo y cuando llegó el día de rodaje 4 meses después me monté en el coche para ir a rodar y me encontré con otro señor. Habían cambiado a mi padre. El rodaje fue genial. Para una secuencia que dura minuto y medio en pantalla estuvimos 8 horas. Rodamos a una cámara y muchos planos”.
Después de su experiencia en cine, volvió al teatro con ‘Hijos de los 90’ en la Sala Azarte. Tiene varios proyectos por estrenar. Ha participado en el último cortometraje de Roberto Pérez Toledo, ‘Después del a erupción’, que rodaron en Lanzarote; y en la película ‘Venus’, de Víctor Conde. Actualmente se encuentra preparando su próximo proyecto teatral: “ayer me confirmaron que voy a formar parte de una obra bastante grande en el Teatro Muñoz Seca. No cuento mucho más porque no se si puedo, pero es una obra que ha estado más de 25 años en el West End de Londres. Así que con muchas ganas de este próximo proyecto”.
