Hace ya varias semanas que os hablábamos de Libres, una webserie que se ha lanzado hace poco, como un comentario de pasada en una noticia sobre otro tema porque Andrea Sainz de Vicuña era una de sus protagonistas.

Queremos aprovechar esta semana que se lanza el capítulo dos y en el que aparece otra centralera, Laura Contreras, para profundizar un poco más y seguir de cerca el proyecto.

Libres es uno de esos proyectos en los que la ética y la estética van de la mano. Es una webserie colaborativa creada con mucho esfuerzo de autogestión y habla de un grupo de jóvenes (15mistas los llamarían algunos) que deciden okupar un pueblo abandonado. Por cierto que el pueblo existe y está a un solo habitante de quedarse como se plantea en la ficción, vacío.

La fuente de financiación del proyecto, al margen de las aportaciones del propio equipo, fue el crowdfounding, seguro que a estas alturas ya todos conocemos estas plataformas como verkami.com o goteo.org que permiten sobrevivir a muchos e interesantes proyectos a través de micromecenazgo.

Agradecemos y valoramos siempre el tremendo esfuerzo que supone realizar una webserie, en la mayoría de los casos con enormes esfuerzos y diminutos recursos. Son la mejor muestra del talento que lucha por hacerse visible en tiempos difíciles. Pero en este caso queremos hacer una mención especial por la calidad técnica y artística que se aprecia  en los dos primeros episodios y por la voluntad casi cinematográfica de retratar una de esas realidades que están sucediendo y no son noticias en los diarios. Mientras unos emigran a otros países otros desandan el camino de sus abuelos volviendo al pueblo.

Los seguiremos de cerca.